La
fotogrametría es la técnica cuyo fin es estudiar y definir con precisión la
forma, dimensiones y posición en el espacio de un objeto cualquiera, utilizando
esencialmente medidas hechas sobre una o varias fotografías de ese objeto.
Una de las
principales aplicaciones de la fotogrametría es la topografía ya que permite
medir coordenadas en tres dimensiones y además da como resultado la
representación compleja de un objeto en un documento de fácil manejo. A ello se
une el carácter instantáneo del registro, con la consiguiente agilidad para
procesar la información frente a la topografía clásica.