Un atolón es un arrecife en forma de anillo, generalmente alrededor de una isla o de un cayo de arena, con una laguna central, la gran mayoría de los atolones se encuentran en la región oeste del Indo-Pacífico. A diferencia de los arrecifes y las barrera de coral, los atolones se pueden encontrar lejos de la tierra, elevándose desde profundidades de miles de metros desde el fondo; al no tener prácticamente ninguna tierra alrededor, no hay vertidos de sedimentos limosos y hasta ellos llega muy poca agua dulce. Están bañados por agua pura del océano, por lo que los atolones presentan un crecimiento coralino espectacular y un agua increíblemente clara.